Sección 4: Ciclos Biogeoquímicos  





 

 

 

 

 

 









Todos los nutrientes fluyen desde los componentes no vivos hasta los vivos, y luego vuelven a los componentes no vivos del ecosistema siguiendo una vía más o menos cíclica conocida como Ciclo Biogeoquímico (bio de vivo, geo de rocas y suelo, y químico por los procesos implicados).  





 

 

 

 

 

 

 









Los elementos más importantes en todos los ciclos de nutrientes son: las plantas verdes, organizan a los nutrientes en componentes biológicamente útiles; los descomponedores, que los devuelven a su estado inicial más simple; y el aire y agua que transportan nutrientes entre los componentes abióticos y los componentes vivos del ecosistema.




 

 

 

 

 

 

 

 







Hay dos tipos básicos de ciclos biogeoquímicos: gaseoso y sedimentario. En los ciclos gaseosos los principales reservorios de nutrientes están en la atmósfera y en disolución en el agua de los océanos. Por tanto, estos ciclos son de carácter global.

 





 

 

 

 










En los ciclos sedimentarios el principal reservorio del elemento está en el suelo, las rocas y los minerales. Pero además, cuando estos elementos están en formas disueltas entran en el ciclo del agua ya sea en el agua del suelo, en lagos, cursos de agua y mares.







 

 

 

 

 






Entre los diferentes ciclos biogeoquímicos destacamos el ciclo del carbono, del oxígeno, del nitrógeno, del fósforo o del azufre. Ciclos como el del azufre son un híbrido entre el gaseoso y el sedimentario, porque tiene reservorios no solo en la corteza terrestre sino también en la atmósfera.



 

 

 

 

 

 

 

 

 









Otros ciclos como el del fósforo es completamente sedimentario, el elemento se libera desde la roca y se deposita tanto en los sedimentos superficiales como en los sedimentos profundos del mar.





 

 

 

 

 

 








Tanto los ciclos gaseosos como los sedimentarios implican agentes biológicos y no biológicos; ambos son impulsados por el flujo de energía a través del ecosistema, y ambos están vinculados al ciclo del agua.





 

 

 

 

 

 

 










El agua es el medio en el cual los elementos y otros materiales se desplazan a través del ecosistema. Sin la circulación del agua y la de los fluidos gaseosos, cesarían los ciclos biogeoquímicos.






 

 

 

 

 

 










El movimiento de los nutrientes se produce a través de los ecosistemas mediante una serie de reservorios vinculados. Estos reservorios, son los componentes principales de los ecosistemas. Un intercambio entre dos reservorios constituye un flujo.