Por Associated Press
Por primera vez en tres décadas, Estados Unidos tiene una nueva raza de perro favorita: adorable para unos, deplorable para otros, el bulldog francés se convirtió el año pasado en la mascota más popular del país, destronando así al labrador retriever, según anunció el miércoles el American Kennel Club (AKC, por sus siglas en inglés).
"Son unos pequeños perros adorables, cómicos y amistosos", indicó Patty Sosa, vocera del Club Bulldog Francés de Estados Unidos.
Según Sosa, estos animales son citadinos, requieren poco corte de pelo y ejercicio. "Ofrecen mucho en un paquete pequeño", comentó.
La popularidad de estos perros -que hace un cuarto de siglo no estaban entre las 75 razas más importantes del país- los ha convertido en blanco de robos, incluido el asesinato a tiros de una mujer de 76 años criadora de perros en Carolina del Sur y el ataque que sufrió un hombre que paseaba a las mascotas de la cantante Lady Gaga en California.
La alta demanda que hay sobre estos perros ha disparado las preocupaciones de que aumente el número de personas que se lanzan a criar bulldog franceses sin conocimientos únicamente para hacer dinero. Por otro lado, está en auge el debate sobre los riesgos que conllevan esta raza, propensa a sufrir complicaciones respiratorias, y problemas en la columna y los ojos, así como enfermedades de la piel.
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La Asociación Veterinaria Británica ha aconsejado no comprar animales de cara chata como los bulldog franceses y los Países Bajos han vetado su cría -el ministro de Agricultura está incluso a favor de prohibir tenerlos-.
“Los bulldogs franceses pueden ser un tema polarizante”, afirmó la doctora Carrie Stefaniak, veterinaria en Glendale (Wisconsin), que forma parte del comité de salud del Club Frenchie, apodo con el que se conoce a esta raza.
Ha tratado a bulldog franceses con dificultades respiratorias y subraya que los futuros propietarios deben investigar sobre los criadores e informarse sobre el costo de los tratamientos médicos que puedan necesitar, que en muchos casos pueden costar miles de dólares. Pero no está en contra de los Frenchies. Tiene dos y los ha entrenado para correr en circuitos especializados y hacer senderismo.
“Estos perros pueden estar muy en forma y ser muy activos”, señaló Stefaniak, "no tienen por qué ser perros sedentarios que no pueden respirar”.
El ranking de popularidad del AKC abarca unas 200 razas del registro canino más antiguo del país. Las estadísticas se basan en casi 716,500 cachorros y otros perros registrados el año pasado, de los cuales uno de cada siete es un Frenchie. La raza menos inscrita es el foxhound inglés.
La clasificación no tiene en cuenta razas mixtas ni, al menos por ahora, los Labradoodles, Puggles, Morkies y otros populares híbridos de “diseño”. Las diez razas más populares del país fueron bulldog francés, labrador retriever, golden retriever, pastor alemán, caniche, bulldog, rottweiler, beagle, perro salchicha y pointer alemán de pelo corto.
Con raíces en Inglaterra y Francia, los bulldog franceses se pusieron de moda entre las élites estadounidenses a principios del siglo XX, pero luego dejaron de ser populares.
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Pero la tendencia cambió de nuevo hace unos años, gracias en parte a las redes sociales a celebridades que optaron por esta raza para sus mascotas, como el actor Leonardo di Caprio, la cantante Megan Thee Stallion o la congresista Alexandria Ocasio-Cortez).
El año pasado fueron registrados unos 108,000 bulldog franceses, 21,000 más que los labradores.
Como criadora y veterinaria, la doctora Lori Hunt ve a los Frenchies como compañeros ideales, pero su popularidad es en su opinión “una maldición, no una bendición”.
“Están siendo muy explotados” por criadores sin escrúpulos, denunció. Veterinaria en Westlake (Ohio), ha visto muchos perros de esta raza con problemas, aunque rechaza que sean de base animales destinados a tener complicaciones en su salud. Algunos de los suyos practican deportes caninos de alto rendimiento.
Otras razas son propensas a dolencias que van desde la displasia de cadera al cáncer, y los perros mestizos también pueden enfermar, señalan los expertos. Pero un estudio publicado recientemente en Gran Bretaña, en el que participaron 24,600 perros, sugiere que los Frenchies tienen una salud “muy diferente y, en gran medida, mucho peor” que la de otros canes, debido sobre todo a su cara escorzada y arrugada.
Teniendo en cuenta estos hallazgos, la Asociación Veterinaria Británica ha declarado que “recomienda encarecidamente” no comprar perros de cara plana y ha hecho campaña para eliminarlos de los anuncios e incluso de las tarjetas de felicitación.
La Asociación Estadounidense de Medicina Veterinaria está estudiando formas de mejorar el bienestar de los perros de cara plana, según su presidenta, la doctora Lori Teller.