Curiosidades sobre los dragones

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     Los dragones son grandes reptiles alados con elevada inteligencia y nula capacidad para la magia que llevan viviendo en el continente desde antes de la llegada de los humanos, aunque en la actualidad no existe ningún dragón puro, pues todos ellos son descendientes entre humano y dragón.

1-No saben ni tienen la capacidad de organizarse ni dirigir a grupos por si mismos, por lo que necesitan del liderazgo de seres humanos o de mestizos para poder aunar esfuerzos con cualquier otra criatura.

2-Los dragones puros y una mínima parte de su descendencia mestiza presentan un grupo sanguíneo denominado "Z neutro", el cual es compatible con la sangre de cualquier otro ser vivo, incluso con la sabia de los árboles.

3-La heterocromía simboliza el poder descontrolado y el caos que dominan el corazón de uno de los suyos. Que un dragón tenga un ojo de cada color significa que en su interior se está desatando una fuerte lucha emocional que va precedida por un poder abrumador y un dolor innenarrable. Se especula que sólo un dragón descendiente de dos linajes muy fuertes y con sentimientos muy intensos puede desarrollar heterocromía en algún momento de su vida.

4-Aproximadamente dos quintas partes de los dragones tienen el triple de nervios en la punta de la cola que en la zona más sensible del cuerpo, convirtiéndola en un punto érogeno mucho más eficaz que cualquier otro, mientras que otra quinta parte de los dragones tiene la cualidad contraria y carece de nervios en la cola, teniéndola completamente insensible.

5-Un alto porcentaje de la población de los dragones ha probado la carne de su propia especie y muchos de ellos la consideran como una delicatessen. Su sociedad no ve con malos ojos el canibalismo y, de hecho, es una práctica habitual que al morir un dragón su progenie devore la carne de su cadáver y lleve sus huesos limpios a los lugares de sepultura.

6-Un dragón puede adoptar forma humana y los jinetes que los montan pueden adoptar forma de dragón. En forma humana pueden invocar las alas y la cola a voluntad.

7-Cada dragón tiene, nada más nacer, una contraparte humana idéntica en personalidad y casi siempre también del mismo sexo con la que tendrá un vínculo espiritual tan fuerte por toda su vida que casi tanto el dragón como el jinete vinculado podrán saber lo que piensa y siente su compañero en todo momento por más lejos que se esté. Por esta razón, los jinetes o dragones que sienten el vacío en el alma que deja su compañero al morir se encuentran ante una existencia hueca y sin sentido, siendo el destino de muchos de ellos el suicidio.

8-Los dragones que están muy hambrientos pueden comerse el doble su peso en carne y hasta seis veces si son dragones volcánicos.

9-Un dragón que haya vivido lejos de los humanos toda su vida jamás podrá empatizar con ellos. Los dragones tienen dificultades para comprender la mayoría de sentimientos que los humanos expresamos con habitualidad y durante el paso de los siglos han terminado asociando sentimientos complejos a sentimientos más básicos. Para ello y sin ser conscientes de ello han usado la ira y la violencia como justificación para todo, y es que estas al ser inherentes a su especie les permiten tanto entender el mundo que les rodea como entenderse a sí mismos y poder expresarse (esta es la razón que explica por qué los dragones pueden empatizar tanto entre ellos incluso en la época en la que trataban a los humanos como comida).

     Para un humano es difícil de comprender, pero un dragón asocia los estados negativos a una expresión particular de la ira y considera que la violencia es el sistema a través del cual expresar sus sentimientos. Como ejemplo: un dragón alegre querrá manifestar su alegría a través de golpes al azar, de cazar presas grandes,  de superar retos difíciles o de pelearse con otros dragones que también estén felices (usualmente esas peleas terminan en amistad) y lo mismo si el dragón se siente furioso o tenso, pues también consideran que la violencia es buena para liberar tensiones y para animarse. Además las emociones negativas las traducen como ira subconscientemente tanto así que un dragón que ha pasado por una situación traumática que para los humanos supondría depresión como el fracaso en la vida tenderá a entender la tristeza como una forma de rabia y eso lo pondrá furioso. El dragón será por tanto mucho más agresivo y lidiará sus malas experiencias a través de un comportamiento violento hasta que su conciencia se haya apaciguado.

10-Todos los dragones nacen vinculados a un elemento o a una forma de la naturaleza; existen dragones de hielo, de fuego, de agua, de aire, de corteza, de tierra, de relámpago, de metal, de sanación y de necrosis... Y existen dragones que, por la singularidad de sus poderes (algunos han sido únicos en toda la historia), son considerados legendarios, los cuales son: los dragones volcánicos capaces de escupir lava candente, los dragones de tormenta que dominan el relámpago, el agua y el viento por igual, los dragones de sangre capaces de mutar su forma y de manipular la sangre ajena a voluntad, los dragones arcanos cuya misma esencia es la magia, los dragones de luz prácticamente ausentes durante eones, los dragones oscuros pues sólo los hijos de Abisirus lo son y los dragones de cristal.

11-El elemento del dragón influye en su personalidad: si es un dragón de hielo, tenderá a ser más serio y callado, si es de fuego tenderá a ser más impulsivo y pasional, etc, aunque aproximadamente el 30% de las veces que no se cumple.

12-Los juramentos son sagrados para los dragones. Una promesa para un dragón es completamente irrompible y suele implicar a algún objeto a modo de precaución, de modo que si el objeto se rompe, el juramento queda invalidado y el dragón es libre.

13-Los dragones al sufrir una fuerte experiencia traumática pueden multiplicar su fuerza física hasta por mil veces. Lo normal es que un dragón furioso la supere brevemente y en pequeña cantidad, pero hay excepciones. Específicamente el linaje del héroe Marwin, quien alcanzó la proeza de sobrepasar sus límites y levantar él solo un continente entero.

Manual: Dragones, magia y políticaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora